domingo, 9 de septiembre de 2012

Si Leonardo levantara la cabeza...

Hoy traigo a mis amigos lectores una recomendación: La Sombra del Viento, de Carlos Ruiz Zafón. Es uno de mis libros favoritos, de hecho diría que está entre los mejores cinco libros que he leído.

No lo recomiendo por que sí, ha sido porque esta mañana me he levantado con la sensación de que necesitaba dibujar algo nuevo. Algo que no es que se me dé demasiado bien... ¡La sombra! ¡Y el viento!
Queda claro que dibujar el viento (y que quede bien) es una tarea ardua para dibujantes tan exigentes como yo, pero lo que sí me parece un esfuerzo titánico es dibujar sombras convincentes.

Por eso he empezado con la sombra, a ver lo que salía. Y como no me caracterizo precisamente por mi conformismo, se me ha ocurrido intentar (y digo intentar) reproducir el cuadro de La Despeinada de Da Vinci. Gran error.


He utilizado papel de pergamino y lápices de colores como arma blanca para realizar un verdadero articidio.
Ha sido toda una blasfemia.
Siempre he tenido un interés especial en este cuadro, pero creo que tendré que esperar. Siento no enseñaros el resultado pero creedme: no queréis verlo.
Espero tener mejor suerte dibujando el viento, ya tendréis noticias mías.

Un saludo sombrío.
Polilla.

1 comentario:

  1. Pásate por mi blog, y verás el desastre que hice yo con este mismo dibujo :-) No te preocupes, Da Vinci, en su dimensión, entiende a los inconformistas, él también lo fue.
    Un beso.

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